Cuando se trata de negocios, es imperativo que seamos capaces de observar las necesidades, los deseos, pero también los miedos y preocupaciones de los demás para que podamos interactuar mejor con ellos y seamos más confiables, y, al hacerlo, podamos también serán percibidos como más competentes y solidarios. Aprender a detectar el significado de los gestos y a expresarte corporalmente mejor es una ventaja competitiva a nivel laboral para cualquier empresa que desee mejorar la comunicación, el liderazgo y las relaciones.